El ministro de Defensa, Pedro Morenés, ha concedido la Cruz del Mérito Aeronáutico con distintivo blanco a los militares del Ejército del Aire que participaron en las aeroevacuaciones de los enfermos afectados por el virus del ébola en Monrovia (Liberia) y en Freetown (Sierra Leona), los pasados días 6 de agosto y 21 de septiembre, respectivamente.
Han sido reconocidos con esta condecoración 13 oficiales, cinco suboficiales y nueve componentes de tropa pertenecientes a la Unidad Médica de Aeroevacuación (UMAER), del Ala 31 y del Grupo 45.
Las Orden Ministerial, pendiente de publicación, explica que las medallas se conceden a estos militares por su nivel de disponibilidad y preparación previa, así como por el esfuerzo, dedicación y espíritu de servicio llevado a cabo durante la realización de estas dos misiones de manera satisfactoria, constituyendo un ejemplo a seguir en situaciones similares.
Con este motivo, el ministro de Defensa, acompañado por el jefe del Estado Mayor del Ejército del Aire, Francisco Javier García Arnáiz, entre otras autoridades, ha recibido esta mañana en la sede del Ministerio a una comisión de los participantes en las aeroevacuaciones.
En el encuentro, Morenés les ha explicado que “esto que han hecho merece un reconocimiento con honor” y les ha agradecido “su envidiable espíritu humano de servicio, alegría y condición de gente ejemplar”.
Misiones realizadas
Las operaciones de repatriación se iniciaron cuando el ministro de Defensa dio la orden de preparación del dispositivo de evacuación.
El Mando de Operaciones realizó el planeamiento que fue ejecutado por personal y medios del Ejército del Aire, bajo el control del Centro de Operaciones Aéreas (AOC) del Mando Aéreo de Combate.
El pasado 6 de agosto una Airbus A-310 del Grupo 45 con una tripulación de nueve personas y un equipo médico formado por dos médicos, una enfermera y dos técnicos sanitarios de la UMAER, despegó desde la base aérea de Torrejón con destino a Monrovia (Liberia) para proceder a la aeroevacuación de los dos españoles afectados por el virus del ébola.
Asimisimo, en septiembre fue un avión T-10 (C-130 'Hércules') del Ala 31 de Zaragoza, el que salió de la base aérea de Torrejón con destino a Freetown (Sierra Leona), para repatriar a otro cooperante español, al que también se le diagnosticó la enfermedad del ébola.
En el avión viajaron dos tripulaciones de vuelo, integradas por un piloto, un copiloto, un navegante y un auxiliar (ocho personas en total) del Ala 31, al que se les unieron dos equipos médicos de la Unidad Médica de Aeroevacuación (UMAER), formados por un comandante médico, un capitán enfermero y un auxiliar de enfermería.
Unidad Médica de Aeroevacuación
La misión primordial de la UMAER es la aeroevacuación del Ejército del Aire, aunque realiza traslados de personal civil en cualquier zona del mundo en la que ha sido requerida por el Gobierno.
Los especialistas sanitarios se integran como parte de la tripulación de la aeronave y se encargan de traslados avanzados, tácticos y estratégicos, tanto en territorio nacional como internacional, que garanticen el transporte y estabilización de bajas en caso necesario.
Las evacuaciones se realizan con los medios aéreos del Ejército del Aire (Boeing 707, Falcon 900, CASA CN-235, 'Hércules' C-130, Casa C-295 y helicópteros 'Super Puma'), que cuentan con los medios técnicos precisos para asegurar su estabilización hasta los centros sanitarios adecuados en caso de bajas en áreas de operaciones, de accidentes aéreos o catástrofes.
La UMAER fue creada en 2003 y es una Fuerza de proyección de alta disponibilidad capaz de realizar el despliegue a las dos horas de recibir la orden de activación.